miércoles, 24 de diciembre de 2014

De transportes y otros pasatiempos

Por fin empiezo el blog con algún dia de retraso. Ha sido un viaje mas largo de lo esperado y entre el jet lag y la conexión deficiente de internet en el primer hotel, no había tenido tiempo hasta hoy de poder subir el post.








Tampoco es que tenga mucho que contar de esta primera etapa del viaje. Sólo que Filipinas esta lejos. Muy lejos. Y que las 8 horas del primer vuelo mas las 4 horas de escala solo sirvieron para que las siguientes 7 horas del ultimo vuelo se hiceran demasiado pesadas. 

Pero aquí no termina nuestra aventura del primer día. Confiados de nosotros salimos del aeropuerto tras haber flanqueado la amable policia de aduanas, las simpaticas chicas de control de plagas, recogido la mochila de la cinta entre simpaticos portamaletas y lo que fue mas dificil todavía, atravesar la marabunta de gente con cara ilusionada y coloridas pancartas de diversos tamaños y creatividades, que esperaba aplastada contra el cristal de contención la salida de los familiares y amigos que venían a pasar las fiestas de vuelta a casa. 

Y ese fue el mayor problema. Ese y que el Aeropuerto NAIA es de los mas dificiles de salir y entrar de los que he estado nunca. No hay mas transporte de acceso que por carretera, ya sea en bus, taxi o coche particular. Y esto te lleva a comerte un atascazo que mejor ir con 8 horas de antelación al aeropuerto si no quieres perder tu vuelo. En nuestro caso fue al reves, y tras esperar 3 horas en la cola de los taxis conseguimos que una catalana muy maja nos colara unas cuantas posiciones para llevarnos en su taxi (muchas gracias Elisa). Asi que mi mejor consejo para los que vengan por primera vez a Manila sería que evitaran las festividades, (ya que la cantidad de gente que habia en el aeropuerto era inmanejable), que hagan la reserva del alojamiento con algún hotel que ofrezca recogida y llevada al aeropuerto (el atasco te lo comes igual pero te ahorras la cola de espera de los taxis), y por ultimo que traigan una mascarilla (el humo de los coches y motos es continuo, en todos los rincones e insoportable).

Reventados del viaje pero sin querer perdernos ni un segundo de la city llamamos a Daphne que ya habia cenado pero nos acompañó en nuestro primer paseo por Makati a un bar de la calle Burgos, una especie de barrio rojo de Manila en el que la actividad erotico festiva se mezcla con naturalidad con el resto de negocios, ante la distraida mirada de los frecuentes puestos de policia, y en el que tambien hay buenos bares y restaurantes. 

Alli despues de ponernos al día y echarnos unas risas sanas y necesarias decidimos terminar la primera jornada maratoniana de viaje. Mañana mas. 

2 comentarios:

  1. Pasarlo muy bien pareja y darle un beso muy fuerte a Daphne que les echamos mucho de menos .Si no hubiera sido por la boda os hubiéramos acompañado seguro
    Un beso muy fuerte

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